Cruceros desde Bangkok

El Palacio Real es un gran edificio de casi 220.000 metros cuadrados de extensión situado al margen derecho del río Chao Phraya. Sirvió como residencia a los distintos reyes desde el siglo XVIII hasta el siglo XX. Creado por el rey Rama I, el edificio es típicamente de estilo renacentista italiano pero con el tejado de toque asiático tailandés donde se ensalzan grandes puntas de color dorado. Destaca sobre la planta imponente del Chakri Mahaprasad Hall con sus guardianes. Su imponente tamaño y la cantidad de edificios muestran la grandeza del poder tailandés y de su monarquía.

Este es el templo más importante de toda Tailandia y el icono religioso por excelencia. Se encuentra dentro del Palacio Real de Bangkok. Se construyó a finales del siglo XVIII y en su interior alberga el Buda de Esmeralda de color verde, el cual se dice fue tallado en el 43 a.C. en la India aunque fue guardado en el templo camboyano de Angkor Wat. El Templo Wat Phra Kaew - como es conocido por los tailandeses-, mantiene en su exterior un gran número de detalles típicos de la arquitectura tailandesa como los mosaicos, sus pintorescos colores y el gran uso de papel de oro para estos detalles. Si coincide con el cambio de estación, es posible ver al Rey de Tailandia en primera fila como anfitrión del cambio de ropa del Buda.

Este templo del siglo XVII se encuentra a poca distancia del Palacio Real. Tiene una gran extensión de 80.000 metros cuadrados. Destaca su bella arquitectura tailandesa con grandes puntas en el tejado “rozando” el cielo y sus coloridas paredes. En su interior se encuentra famosa escultura del Buda Reclinado más grande de Tailandia con un porte de 46m de largo y 16m de alto, y adornado sólo con pan de oro. Este es, sin lugar a dudas, uno de los mayores atractivos de Bangkok.

Este grandilocuente templo se localiza en la orilla del río Chao Phraya. El “Templo del Amanecer” destaca especialmente por su gran torre central de 82m de altura ligada a sus 7 largos brazos llamados el “Tridente de Shiva” y una curiosa decoración formada por conchas marinas y porcelana china de colores vibrantes. Fue aquí donde reposó el Buda de Esmeralda antes de desembarcar en el templo de Wat Phra. En su interior es innegociable admirar los 6 pabellones de granito verde de gran tamaño donde se encuentran estatuas que magnifican a los distintos dioses tailandeses. Este templo es una visita asegurada por su localización, su tamaño y su particular arquitectura. Es un verdadero espectáculo ver su iluminación al atardecer.

Ubicado a una distancia entorno a 1.45h de Bangkok, es una de las grandes “obras” de este país asiático. Este lugar es ideal para ver el día a día de un verdadero mercado flotante tradicional de Tailandia. Lo más genuino del mercado son las pequeñas barcas de los comerciantes que negocian en los canales llenos de productos artesanales y comida. Es posible disfrutar de este mercado tanto a pie desde la orilla surcando los miles de puestos de venta o alquilando una barca llevada por un lugareño. Una de las mejores estampas es la de los monjes budistas que acuden todos los días a pedir comida y ofrecen su bendición.

Una de las características principales de Bangkok es el agua. Rodeada de canales - o khlongs -, Bangkok también es llamada la “Venecia del Este”. En sus comienzos el uso que se les daba era como transporte de personas y mercancía para la venta de los productos en los mercados flotantes. En la actualidad son calles solamente transitables en barca y tienen un ambiente muy pintoresco, donde aún sobreviven algunos viejos puentes y casas antiguas de madera. Muchos de ellos ya han sido cerrados como calles, por lo que es recomendable adentrarse especialmente en el canal de Bangkok Noi.