Cruceros desde Dubrovnik

De las tres puertas de entrada a la ciudad de Dubrovnik, te recomendamos que no te pierdas la Puerta de Pile. Gracias a esta entrada podrás acceder, a través de un puente levadizo, directamente al casco antiguo. Esta puerta fue construida en piedra y sobre ella se tallaron dos ángeles y un hombre barbudo entre ambos. Además, sobre la puerta se encuentra un nicho con la estatua de San Blas, patrono de la ciudad.

Un paseo por la Calle Stradun, también conocida como la Placa, es una de las visitas imprescindibles, ya que esta avenida divide el casco antiguo en dos y es el punto alrededor del cual gira toda la vida de la ciudad. Durante tu paseo podrás observar los edificios más reseñables de Dubrovnik, numerosas tiendas y restaurantes, artistas callejeros y un ambiente animado y festivo que te permitirá sentir la verdadera esencia de la Perla del Adriático.

Uno de los imperdibles durante tu escala de crucero en Dubrovnik es un paseo a través de sus murallas de piedra. La mayor parte de estas murallas han llegado hasta la actualidad y son el mayor atractivo turístico de la ciudad. Este imponente sistema de defensa tiene más de 1900 metros de perímetro entre los que se distribuyen 16 bastiones, 5 fortalezas y más de 100 cañones. Además, durante tu paseo por las murallas podrás disfrutar de unas vistas inmejorables.

La Iglesia de San Blas es uno de los monumentos que podrás visitar durante tu estancia en Dubrovnik, ya que se sitúa en medio de la Plaza de la Luza y destaca por su estilo arquitectónico, que contrasta con el resto de edificios que la rodean. La importancia de esta iglesia es que está consagrada a San Blas, patrón de la ciudad. Muy cerca se encuentra además la imponente Torre del Reloj, un edificio blanco de 31 metros de altura cuyas campanas marcan la hora cuando son golpeadas por los Zelenci, dos estatuas de bronce conocidas como Maro y Baro.

La Catedral de la Asunción de Dubrovnik es uno de los símbolos indiscutibles de la ciudad. Este edificio religioso fue construido en el siglo XVII sobre las ruinas de antiguas iglesias de los siglos VI y VII. Esta catedral fue declarada Patrimonio de la Humanidad en 1979 y la leyenda cuenta que su construcción fue posible gracias a un donativo de Ricardo Corazón de León, que fue salvado de un naufragio en esta ciudad.

El funicular de Dubrovnik, construido en 1969, es una de las excursiones preferidas por los cruceristas que llegan a la ciudad. Una vez hayas montado en él podrás disfrutar de las mejores vistas panorámicas de la Perla del Adriático hasta que llegues a su punto más alto, donde encontrarás un restaurante, un antiguo anfiteatro, varios miradores y un Museo de la Guerra del Golfo de Dubrovnik.